Las claves del éxito gay

¿A cuántos gays éxitos, que no sean ni Rick Martín ni Elthon Jhon, conocemos? Algunos, pocos o muchos. Todo depende del cristal de donde veamos las cosas. Para un gay el éxito variaría en dependencia de los objetivos de vida de cada quien, pero a nivel social el tener una casa, un automóvil, una pareja estable y una vida social activa puede significar el éxito. Pero, como no vamos a caer en el cliché de la vida heterosexista…acá te presentamos las claves para lograr el éxito gay.

1. Estudiar: no podemos dejar de mencionar como la primera clave del éxito, al estudio. Nadie puede dejar por detrás el estudio al menos que sean de coeficiente intelectual como Albert Ainstain. Estudiar trae los frutos necesarios, cuando se sabe perseverar y aprovechar las oportunidades del mundo. Nada que todo es “argolla” o “conecte”.

2. Perseverancia ante todos los retos no hará más fuerte y dará mayor experiencia a nuestras vidas. Ser perseverante nos llenará la vida de proyectos que nos posicionen en la sociedad como un referente en el área donde nos desempeñemos. La perseverancia además nos dará los conocimientos para ser los mejores, bien dice que el que persevera alcanza y que de los errores de la vida se aprende.

3. Dedicación a lo que nos gusta en medio de nuestras posibilidades, lo que nos dará una satisfacción personal y las ganas de ser mejores día con día. Cada quien debe saber encontrar su foco y si no está al alcance pues luchar por lograrlo. En todo caso, debemos saber encontrar y adaptarnos a nuestras realidades.

4. Enfoque en las metas de vida, que deben ser definidas en la medida en que nos involucremos en proyectos puntuales. Dichos proyectos no deben abarcar mucho, pues no daremos abasto para tanto. El enfoque debe ser en un par de proyectos puntuales, a los que dediquemos tiempo y lograr el éxito esperado. Una vez que el proyecto haya dado todo lo que pudo, nos enfocamos en otro más desafiante.

5. Sacrificio cuando se requiere, porque todo a su tiempo. Habrá que hacer sacrificios que muchas veces no nos gusten o quizás no sean del agrado de amigos o familiares. Sin embargo, los sacrificios que más valen la peno son los más difíciles de hacer.

Al final, el éxito depende de cada quien. La formula la hace cada quien y es obvio que el éxito no va de la mano con el exceso.